El acristalamiento adecuado puede marcar la diferencia entre un proyecto eficiente, seguro y confortable, o una instalación con problemas de consumo y reclamaciones.
La elección de la composición correcta no es un detalle: es la clave para cumplir normativa, optimizar costes y aportar valor añadido al cliente final.
En Ramos Glass, sabemos que cada proyecto exige un tipo de acristalamiento específico. Por eso, te explicamos cómo elegir la mejor opción según el uso, la ubicación y los requisitos técnicos.
Factores a considerar antes de seleccionar un acristalamiento
Antes de entrar en las tipologías, conviene repasar las variables que condicionan la elección:
- Clima y orientación: no es lo mismo instalar en una fachada sur en Sevilla que en una vivienda en Burgos.
- Normativa y eficiencia: CTE DB-HE, certificaciones energéticas y requisitos de edificios de consumo casi nulo.
- Uso del espacio: residencial, comercial, sanitario o industrial.
- Carpintería y herrajes: el vidrio determina el Uw, pero hay que confirmar peso y compatibilidad con el perfil.
- Seguridad y entorno: riesgo de impactos, vandalismo, incendios o exposición acústica.
- Coste global: más allá del precio por m², importa el ahorro energético y la durabilidad.
Tipos de acristalamiento que ofrece Ramos Glass
1. Doble acristalamiento: la solución que nunca falla
El doble acristalamiento es el más común y el que más se instala en viviendas y locales. Se compone de dos vidrios separados por una cámara de aire o gas. ¿El resultado? Aísla mejor que un vidrio simple, evita condensaciones y mantiene el calor en invierno y el fresco en verano.
Es la opción ideal cuando el cliente busca mejorar el confort y reducir la factura energética sin disparar el presupuesto. Perfecto para reformas de ventanas y rehabilitaciones.
2. Triple acristalamiento: máxima eficiencia
Si tu cliente quiere lo mejor en aislamiento, el triple acristalamiento es la respuesta. Tres vidrios y dos cámaras que ofrecen un rendimiento superior tanto en frío como en calor.
Se recomienda en proyectos donde la eficiencia energética es prioritaria (casas pasivas, viviendas de alta gama, edificios de bajo consumo). También es útil en climas extremos o en lugares donde el confort es un argumento de venta.
El instalador que ofrece triple acristalamiento transmite confianza: es una solución premium que convierte una ventana en una inversión a largo plazo.
3. Vidrio laminado de seguridad: protección y tranquilidad
Hay espacios donde la seguridad es lo primero: portales, escaparates, locales a pie de calle o colegios. En estos casos, lo mejor es el vidrio laminado de seguridad.
Funciona como un “parabrisas”: si se rompe, los fragmentos quedan pegados a una lámina interior, evitando daños y dificultando intrusiones. Es obligatorio en muchos proyectos y muy recomendable para dar tranquilidad al cliente final.
Además, este tipo de acristalamiento se puede combinar con control solar o aislamiento acústico, ofreciendo seguridad y confort en un mismo producto.
4. Vidrio decorativo y de interior: diseño que marca diferencia
Cada vez más clientes buscan diferenciar sus viviendas o locales con un toque de diseño. Ahí entra en juego el vidrio decorativo y de interior.
Puede ser translúcido, texturizado, con acabados especiales o incluso con impresión personalizada. Sirve para separar ambientes, dar privacidad sin perder luz o aportar carácter a una fachada.
Para instaladores y tiendas de ventanas, es un producto que abre nuevas oportunidades.
5. Vidrios antifuego: seguridad en grandes proyectos
En ciertos edificios (hospitales, escuelas, oficinas, naves industriales) la normativa exige vidrios antifuego.
Estos acristalamientos están diseñados para resistir altas temperaturas y evitar que el fuego y el humo se propaguen de un espacio a otro durante un tiempo determinado.
Más allá de cumplir con la ley, este vidrio aporta confianza a arquitectos y promotores.
Para instaladores y distribuidores, contar con un proveedor que fabrica y certifica este tipo de soluciones es un plus competitivo.
Cómo elegir el acristalamiento correcto según tu proyecto
- Vivienda en clima templado: doble acristalamiento con bajo emisivo y gas argón.
- Edificio de alta eficiencia o Passivhaus: triple acristalamiento con doble cámara y capas selectivas.
- Locales comerciales o escaparates: laminado de seguridad con control solar.
- Diseño interior o fachadas singulares: vidrio decorativo con acabado personalizado.
- Hospitales, colegios o edificios públicos: vidrios antifuego certificados según normativa.
Vitryo: la evolución del acristalamiento premium
Dentro de Ramos Glass nace Vitryo, la submarca orientada a arquitectos y proyectistas que buscan soluciones de vidrio aislante con tecnología propia de última generación.
Vitryo representa:
- Eficiencia energética superior: soluciones de hasta triple acristalamiento para reducir consumos.
- Máxima resistencia térmica y acústica: vidrios preparados para entornos exigentes.
- Estética impecable: acabados que combinan precisión técnica con diseño contemporáneo.
Es la respuesta para proyectos que requieren un equilibrio perfecto entre prestaciones técnicas y diseño de vanguardia.
El acristalamiento no es un simple componente: determina la eficiencia, la seguridad y la rentabilidad de cada obra. Con Ramos Glass, distribuidores, instaladores y arquitectos encuentran una gama completa de soluciones: desde el doble y triple acristalamiento hasta vidrios laminados de seguridad, decorativos y antifuego, además de la línea premium Vitryo.
¿Quieres especificar el vidrio adecuado para tu próximo proyecto de rehabilitación o nueva construcción? Contacta con Ramos Glass y descubre cómo nuestros acristalamientos certificados te ayudarán a diferenciarte, reducir incidencias y ofrecer a tus clientes la máxima calidad.